El pasado miércoles 07 de junio se realizó una sesión especial de la Cámara de Diputadas y Diputados, con el fin de conocer más antecedentes de la Falla San Ramón, falla geológica que cruza la precordillera santiaguina de norte a sur. En la sesión participaron como expositores el Dr. Gabriel Easton (Geología U. de Chile) y el Dr. Marcelo Lagos (Geografía U. Católica), quienes detallaron las características de la falla e hicieron un llamado al mejoramiento de las herramientas de planificación urbana.
Es un importante objeto geológico para la ciudad de Santiago, dado que es una falla activa, emplazada en zonas de alta densidad poblacional que cruza todas las comunas del piedemonte cordillerano (Lo Barnechea, Las Condes, Vitacura, La Reina, Peñalolén, La Florida, Puente Alto y Pirque), que concentran más de 1,6 millones de habitantes. Un quinto de los habitantes de Santiago vive sobre ella.
Aunque se le conoce desde hace más de sesenta años, es en las últimas dos décadas cuando se ha logrado avanzar hacia una caracterización detallada. "Científicamente, hoy nadie duda de la Falla San Ramón como un elemento de peligro para la ciudad de Santiago", señaló el Dr. Easton, quien ha desarrollado diferentes proyectos junto a equipos multidisciplinarios de científicos y organismos públicos para conocer sus características, comportamiento y peligrosidad, entre los que se cuentan el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu), la Oficina Nacional de Emergencias (Onemi, actual Senapred) y Centro Sismológico Nacional (CSN).
Tras décadas de investigación, esto es lo que se sabe de la falla de San Ramón:
Por otro lado, las investigaciones han demostrado que se trata de una falla inversa, es decir, que desde millones de años hasta el presente ha montado y deslizado el bloque cortical cordillerano sobre el bloque de la depresión del valle de Santiago, generando rupturas sísmicas de diferente magnitud.
Es la combinación entre una falla geológica activa y la presencia de una gran densidad de población a lo largo de vastos sectores del borde oriente de Santiago lo que ha motivado una investigación multidisciplinaria, especialmente durante la última década.
Por ello, los investigadores hicieron un llamado a mejorar las herramientas de planificación urbana. En este sentido, el Dr. Easton señaló que, a pesar de la evidencia y el conocimiento científico, y en ausencia de normativas específicas en esta materia, la ciudad de Santiago ha continuado su expansión hacia el borde oriente, densificándose sobre la falla y por lo tanto, incrementándose la cantidad de población que vive directamente expuesta a esta amenaza, aspecto ya señalado desde el año 2012.
Por otro lado, el Dr. Lagos remarcó la necesidad de hacer una "gestión del riesgo prospectiva, que use la información existente para hacer una planificación urbana inteligente. Porque si la planificación urbana no se hace cargo de esto ahora, evidentemente sería una constructora de riesgo".
"En general, la gente no sabe si vive o no sobre la Falla San Ramón. Por eso es importante que el Plan Regulador Metropolitano de Santiago la incorpore, para que se norme sobre esta materia y se transparente la información a la ciudadanía", señaló el Dr. Easton, quien además hizo otras recomendaciones (realizadas en conjunto con una serie de especialistas de la Universidad de Chile en el documento disponible en este link), entre las cuales se destacan:
Los cambios en el PMRS son urgentes, dijo Easton, dado que "es importante que la ciudadanía, los organismos públicos y las empresas cuenten con información pertinente y transparente, con una normativa urbana en relación con un objeto de riesgo como este", señaló.
"Si bien los terremotos en este tipo de fallas geológicas son menos frecuentes que los terremotos de subducción, es decir, del contacto entre las placas tectónicas de Nazca y Sudamericana, los terremotos corticales de todas maneras ocurren y volverán a ocurrir (...) Hemos venido levantando este tema con el anhelo que la normativa la incorpore y de ese modo contribuir a la reducción del riesgo de desastres en nuestro país", complementó el Dr. Easton.
El Dr. Marcelo Lagos señaló que "en gestión de riesgo de desastres, nuestro país ha estado al debe. Hemos sido sorprendidos por una erupción en Chaitén, el terremoto y tsunami de 2010 (...) En la práctica, Chile da permanentemente ejemplos de un abordaje reactivo. Sobre la mesa hay toneladas de antecedentes, que nos revelan que el principal asentamiento humano de este país (en cuanto a cantidad de población) está expuesto a un peligro (...) Generalmente somos sorprendidos por la naturaleza, por eventos no esperados, pero hoy nadie puede decir que la falla no es comprendida", cerró.
Publicado el miércoles 5 de julio de 2023