Francisco Delgado: Geólogo en tiempo real

A diferencia de sus colegas, que estudian nuestro planeta con los pies puestos en la tierra, el Dr. Francisco Delgado lo hace desde arriba, desde el espacio. Esta forma de trabajar le permite analizar las deformaciones de la corteza en tiempo real y estudiar fenómenos con un gran sentido de la inmediatez.

Tradicionalmente, la geología se asume como una ciencia de terreno, llevada a cabo por científicos en sitios inhabitados, que pasan días y semanas estudiando la historia de nuestra corteza terrestre. Pero desde hace algunas décadas, las ciencias de la Tierra empezaron a sufrir un cambio revolucionario que modificó su forma de trabajar.

El Dr. Francisco Delgado se asume como parte de una nueva generación de geólogos. A diferencia de sus colegas, que estudian nuestro planeta con los pies puestos en la tierra, el Dr. Delgado lo hace desde arriba, desde el espacio.

Su oficina, ubicada en el departamento de Geología de la Universidad de Chile, está tapizada de posters y vistas satelitales de volcanes, continentes y otros accidentes geográficos. A la izquierda, un mapa del Parque Yellowstone. A la derecha, un diagrama de los flujos de magma de un volcán. Y en su escritorio, una fotografía cenital del planeta Marte obtenida por el Mars Reconnaisance Orbiter (MRO). "Soy geólogo, pero en mi carrera he debido adquirir conocimientos de sistemas computacionales, ingeniería aeroespacial e ingeniería eléctrica”, dice.

Esta forma de trabajar le permite analizar las deformaciones de la corteza en tiempo real y estudiar fenómenos con un gran sentido de la inmediatez.

Para ello, Delgado pasa gran parte de su tiempo analizando imágenes obtenidas por las redes de satélites de radar y ópticos que orbitan nuestro planeta (Sentinel-1, ALOS-2, Pléiades) y gracias a estos datos abiertos, Delgado es capaz de conocer y analizar eventos geológicos de importancia, tales como terremotos, erupciones volcánicas, compactación de acuíferos, glaciares, entre otros.

Hacer trabajo de terreno implica organizar una expedición hasta el sitio, con todas sus complejidades logísticas, y repetirla periódicamente para comparar las mediciones en el tiempo. Y aunque esto sigue siendo parte esencial del trabajo en el mundo de las geociencias, la tecnología ha contribuido mucho al conocimiento científico. Ahora, es posible trabajar con imágenes satelitales como complemento.

Trabajar de esta manera trae tres beneficios principales: Disminuye los costos de la investigación científica, permite conocer la secuencia de eventos prácticamente en tiempo real, es posible abarcar estudios a lo largo y ancho de toda la Tierra y hace posible obtener información de lugares de dificil acceso. “Lo especial al trabajar con imágenes es que puedes conocer eventos bastante recientes”, como el reciente terremoto de Turquía, cuyos datos fue posible analizarlos desde Santiago. Por ejemplo, el Dr. Delgado ha podido estudiar fenómenos en lugares tan distantes como Yellowstone, Perú, Vanuatu y Galápagos.

Uno de los últimos trabajos realizados en este campo es un análisis del complejo volcánico Puyehue-Cordón Caulle. Mediciones de satélite han podido determinar que el complejo ha mostrado un crecimiento de 1,25 metros en los últimos once años. "Este es un volcán extraordinariamente activo, casi que podríamos llamarlo el Yellowstone chileno", dice Delgado.

El campo en el que trabaja Delgado es muy incipiente en nuestro país. "Si mal no recuerdo, creo ser uno de los únicos investigadores que trabaja en este campo en Chile", dice. Sin embargo, en el mundo el tema está bien desarrollado. De hecho, la red de satélites que permite estas investigaciones pertenece a agencias espaciales civiles de la Unión Europea, Canadá o Japón. "En esos países existe mucho desarrollo del campo, lo que permite anticipar escenarios y proteger a la población en casos de desastres naturales", concluye.

Publicado el miércoles 5 de abril de 2023